حقوق المهاجرين

Primary tabs

Caselaw

El Comité Europeo de Derechos Sociales concluyó que Italia es responsable de políticas y prácticas que conducen a que los residentes romaníes y sinti vivan en viviendas segregadas y extremadamente inadecuadas, así como del desalojo forzoso de comunidades enteras y la expulsión de Italia de romaníes migrantes. En la decisión también se halló a Italia responsable del clima subyacente de racismo y xenofobia existente en el país.

The decision holds Italy accountable for policies and practices that have resulted in Roma and Sinti residents living in segregated and grossly inadequate housing conditions, as well as forced eviction of entire communities and expulsion of migrant Roma from Italy.  The case also held Italy accountable for the underlying racist and xenophobic climate created in Italy.  The European Committee of Social Rights found that Romani camps have been destroyed and their inhabitants forcibly evicted and often expelled from Italy by state police or other representatives of the public authority, often

The case was filed in March 2003 to force the Comisión Nacional de Pensiones Asistenciales (national agency in charge of welfare pensions) to grant a disability pension to Daniela Reyes Aguilera, a Bolivian girl who has a disabling condition preventing her from moving legs and arms, speaking, and eating on her own. Article 1, paragraph "e" of Decree 432/1997, which requires foreign citizens to prove legal residence in Argentina for at least twenty years in order to qualify for disability pensions, was contested as unconstitutional.

El caso fue llevado a la justicia en el mes de marzo de 2003 para que se obligara a la Comisión Nacional de Pensiones Asistenciales a otorgar la pensión por invalidez a Daniela Reyes Aguilera, una niña de nacionalidad boliviana con una discapacidad que le impide la movilidad de sus miembros, comunicarse verbalmente, y alimentarse por cuenta propia.

Los demandantes eran residentes permanentes de Sudáfrica. Cuestionaron disposiciones legislativas que limitaban los beneficios sociales para ancianos a los ciudadanos sudafricanos e impedían que los hijos de ciudadanos extranjeros que se encontraran en la misma situación que los demandantes pudieran reclamar los beneficios de guardería disponibles para los niños sudafricanos (independientemente de la ciudadanía que tuvieran los niños).

FIDH denunció que Francia había violado el derecho a asistencia médica (artículo 13 de la Carta Social Europea Modificada) al eliminar la excepción que favorecía a los inmigrantes ilegales con muy bajos ingresos de pagar cargos por tratamiento médico y hospitalario. También denunció que una reforma legislativa de 2002 que restringía el acceso a servicios médicos por parte de los hijos de inmigrantes ilegales violaba los derechos de los niños a ser protegidos (artículo 17). El Comité opinó que Francia había violado los derechos de los niños, pero no los de los adultos.

Tres hermanos (V) vivían en Suiza desde 1980 como refugiados reconocidos. En 1987, fueron echados de dicho país a Checoslovaquia por delitos penales. En septiembre de 1991 volvieron a entrar a Suiza en forma ilegal. A Suiza le era imposible volver a echarlos, porque la nueva República Checa había rescindido su ciudadanía, pero se les negaba el apoyo/asistencia social debido a su condición de ilegales. El Tribunal sostuvo que la exclusión de tres ciudadanos extranjeros violaba un derecho constitucional implícito a “conditions minimales d'existence” (condiciones mínimas de existencia).

The applicants were permanent residents in South Africa. They challenged legislative provisions, which limited entitlement to social grants for the aged to South African citizens, and would prevent children of non-South African citizens in the same position as the applicants from claiming any of the childcare grants available to South African children (regardless of the citizenship-status of the children themselves).  

Three brothers (V) lived in Switzerland from 1980 as recognised refugees. In 1987, they were expelled from Switzerland to Czechoslovakia for criminal offences. In September 1991, they illegally re-entered Switzerland.

FIDH claimed that France had violated the right to medical assistance (Article 13 of Revised European Social Charter) by ending the exemption of illegal immigrants, with very low incomes, from charges for medical and hospital treatment. Further, the complainant alleged the rights of children to protection (Article 17) were contravened by a 2002 legislative reform that restricted access to medical services for children of illegal immigrants. The Committee found that France had acted contrary to the rights of children, but not adults.