Miembros reunidos en México desarrollan un plan estratégico para el Proyecto de Captura Corporativa

Unos 25 miembros de la Red-DESC — movimientos sociales y organizaciones no gubernamentales (ONG) de todo el mundo— se reunieron del 29 al 31 de agosto de 2017 en Ciudad de México para desarrollar un plan estratégico para los próximos dos años del Proyecto de Captura Corporativa del Grupo de Trabajo de Rendición de Cuentas Corporativa (GTRCC).  

La reunión estuvo dirigida por los miembros del Grupo Asesor del Proyecto de Captura Corporativa (GAP): Above Ground (Canadá), CNS (India), Defend Job (Filipinas), Habi Center (Egipto), PODER (México) y SiLNoRF (Sierra Leona) han liderado este proyecto en los últimos dos años. El primer día, el presidente de la Junta Directiva de la Red-DESC Francisco Rocael (Consejo de Pueblos Wuxhtaj, Guatemala) destacó la importancia de la reunión en la naturaleza global de la captura corporativa que enfrentan las comunidades en todas las regiones, que socava el control comunitario sobre los recursos y el interés público general. Después de un resumen de las actividades iniciales y los resultados del proyecto, los miembros compartieron tres estudios de caso para explorar la definición actual y las manifestaciones de captura corporativa delineadas en el proyecto: el caso de Mining Watch Canadá se enfoca en la diplomacia económica, el de SiLNoRF en la manipulación comunitaria y el de APRODEH en la interferencia legislativa de las empresas mineras. Otros dos casos, presentados por Terra de Direitos y CNS, pusieron de manifiesto los esfuerzos de la sociedad civil para combatir la captura corporativa, desafiando la interferencia judicial en el sistema de justicia brasileño y bloqueando la participación de las empresas en la política de salud pública y asociaciones relacionadas a través del Convenio Marco para el Control del Tabaco.

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Este proyecto surgió de los debates de los miembros en los anteriores Foros de los Pueblos de la Red-DESC sobre Derechos Humanos y Empresas y se concretó hace dos años en una primera reunión estratégica en Ciudad de México, que también fue co-organizada por PODER. En esa reunión, el GAP articuló una definición inicial: “La captura corporativa se refiere a los medios por los cuales una élite económica socava la realización de los derechos humanos y medioambientales mediante el ejercicio de una influencia indebida sobre las instituciones y los responsables de tomar decisiones en el ámbito nacional e internacional”. También empezó a delinear sus manifestaciones específicas basadas en casos de miembros y aliados, incluyendo: la manipulación de la comunidad, la diplomacia económica, la interferencia judicial, la interferencia legislativa y política, la privatización de los servicios de seguridad pública y las prácticas de “puertas giratorias”.

La discusión en grupo en esta reunión profundizó el análisis común de la captura corporativa y sus diversas manifestaciones, por ejemplo subrayando los proyectos de responsabilidad social de las empresas como una forma de manipulación de la comunidad, los participantes destacaron los intentos de las empresas de conseguir una “licencia social para operar” a través de proyectos de desarrollo comunitarios, a veces en asociación con otras ONG, ofreciendo a menudo beneficios a corto plazo para enmascarar los daños a largo plazo. Los miembros también insistieron en la manipulación corporativa de los medios de comunicación, que influye en las narrativas dominantes de progreso y desarrollo y justifica tanto la privatización de los servicios públicos esenciales como el uso de los recursos públicos (mediante subsidios o políticas fiscales, el apoyo de organismos de crédito a la exportación y otras formas de finanzas públicas) para impulsar los intereses privados de los actores corporativos. Los miembros también abordaron el papel de las empresas que financiaban estudios e investigaciones académicas de manera más amplia, lo que se identificó como captura corporativa de las instituciones de educación científica y pública. En el ejercicio de profundización del análisis colectivo, también se reconoció la necesidad de prestar atención al contexto, en particular las situaciones en las zonas de conflicto y ocupación.

A continuación, la captura corporativa fue identificada como una de las condiciones globales comunes que amenazan a las comunidades de todo el mundo en la Carta Común para la Lucha Colectiva, desarrollada inicialmente por el Grupo de Trabajo de Movimientos Sociales y ratificada por todos los miembros presentes en la Reunión Global de Estrategia de 2016 de la Red-DESC. La reunión más reciente posicionó al GTRCC para ayudar a guiar y contribuir a las acciones de toda la Red destinadas a abordar la captura corporativa en el futuro próximo, asegurándose de que las demandas, el análisis y las narrativas de los movimientos sociales y las comunidades estén en el centro de dicha estrategia.

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Durante la reunión de estrategia, los participantes describieron los principales cambios que querrían ver en los próximos años. Un impulso para fortalecer a la sociedad civil en su lucha contra la captura corporativa y recuperar el interés público fue uno de los objetivos principales, modificando las narrativas públicas más amplias y revelando la verdadera naturaleza de las empresas, que tienen el principal objetivo y propósito final de obtener ganancias para unos pocos en lugar de derechos humanos para todos.

El segundo día, los miembros se dividieron en tres grupos para profundizar el análisis y empezar a explorar reacciones concretas relacionadas con la popularización y la construcción de alianzas, documentación y movilización dirigida por la comunidad y reformas legislativas y políticas modelo. En el último día, estas discusiones se reunieron para dar forma a un plan coordinado de incidencia y campañas para los próximos dos años. Grupos de miembros reafirmaron su compromiso con el trabajo colectivo en cinco áreas principales de acción: revisión de las manifestaciones de captura corporativa; refinamiento del análisis de políticas y ???; documentación de éxitos y lecciones (incluyendo varias surgidas durante la reunión); materiales populares de comunicación sobre manifestaciones, y herramientas y cursos para la documentación dirigida por la comunidad. Los miembros también se comprometieron a utilizar de manera individual y colectiva una serie de oportunidades y eventos durante el próximo año para dar prioridad a la captura corporativa y abogar por cambios concretos. Por ejemplo, los miembros están organizando eventos públicos para la próxima reunión del Grupo de Trabajo Intergubernamental de las Naciones Unidas encargada de redactar un tratado sobre derechos humanos y empresas, así como para el Foro de las Naciones Unidas sobre Derechos Humanos y Empresas, y están articulando una posición de incidencia común sobre la captura corporativa y el tratado. También hubo un fuerte impulso para fortalecer la movilización y las campañas, por ejemplo para apoyar a los miembros a crear conciencia y respaldar la acción de miles de pequeños agricultores que participan en la Caravana de África Occidental por la  Tierra, el Agua y las Semillas. Esto incluyó la discusión sobre cómo avanzar una campaña y acción que abarque a toda la Red, incluso mediante un día global de acción a mediados de 2018.