La sociedad civil lleva a Francia a oponerse a la comercialización de la educación

Como resultado de los esfuerzos de incidencia en torno al llamado de la sociedad civil francófona contra la comercialización de la educación, Francia se opuso a la comercialización de la educación afirmando que "actuará contra cualquier intento de comercialización de la educación" en la cooperación internacional. Jean-Marie le Guen, Secretario de Estado francés de ayuda al desarrollo, hizo la declaración y añadió que Francia considera la educación como un servicio público que no puede ser negociado.

La declaración de Francia ilustra la eficacia de la incidencia de la sociedad civil en torno al llamado. El llamado, iniciado por seis organizaciones, entre ellas los miembros de la Red-DESC, el Right to Education Project y la Global Initiative for Economic, Social and Cultural Rights, fue presentado por más de 300 organizaciones de la sociedad civil de 38 países distintos. Dicho llamado se produjo tras una declaración de 57 jefes de Estado y de Gobierno francófonos que plantearon sus preocupaciones acerca de la comercialización de la educación y que reafirmaron su compromiso respecto a una educación pública de calidad. 

El llamado instó a los Estados a establecer sistemas educativos públicos de calidad gratuitos, a regular la educación privada y a eliminar los establecimientos educativos con fines comerciales. También exhortó a la Organización Internacional de la Francofonía (OIF) a colaborar con la sociedad civil para promover mecanismos institucionales que regulen a los actores privados en la educación.

Este anuncio inequívoco de Francia indica su potencial como actor internacional que promueve la educación pública, en medio de la privatización y comercialización mundial de la educación primaria y secundaria. Esta posición también se opone a la postura de países como el Reino Unido, cuya ayuda a la cooperación para el desarrollo respalda el desarrollo de escuelas privadas.