Numerosos miembros resisten intento de los estados de debilitar el sistema interamericano de derechos humanos
A principios de mayo, más de 200 organizaciones de la sociedad civil expresaron su preocupación respecto de acciones recientes de estados destinadas a debilitar el sistema interamericano de derechos humanos. Las organizaciones, junto con varios particulares, instaron a los estados de Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Paraguay a no tomar más medidas para debilitar la eficacia del sistema. Entre los signatarios se encuentran los miembros Amnesty International, Asociación Pro Derechos Humanos (APRODEH), Center for Justice and International Law (CEJIL), Center for Reproductive Rights (CRR), Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan”, Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), Conectas, Due Process of Law Foundation (DPLF), Fundar, Justiça Global, Plataforma Dhesca Brasil y Terra de Direitos.
La declaración de la sociedad civil fue una reacción a los anuncios efectuados en abril por los gobiernos de Chile y Paraguay de que los cinco estados mencionados anteriormente habían presentado una carta ante el Secretario Ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos destacando posibles fuentes de restricciones legales sobre el poder del sistema, incluyendo la doctrina del margen de discreción, a pesar de que no se aplica al Continente Americano.
La declaración de las organizaciones miembro de la International Coalition of Human Rights Organizations in the Americas (coordinada por CEJIL), junto con otros grupos de la sociedad civil, señaló que todas las “sugerencias [de los estados]... son de carácter restrictivo y carecen de fundamento en las normas y estándares reconocidos del derecho internacional”. Los signatarios también recordaron un intento anterior de parte de los estados de debilitar el sistema entre 2011 y 2014, señalando que el nuevo intento “ocurre en el marco de esfuerzos anteriores destinados a condicionar el trabajo y el impacto de los órganos del sistema interamericano de derechos humanos, dañando su autonomía e independencia”.
“En lugar de cumplir de buena fe con sus resoluciones, los gobiernos de Argentina, Brasil, Colombia, Paraguay y Chile están haciendo otro intento flagrante de debilitar y encadenar el sistema interamericano”, afirmó en otra declaración Erika Guevara-Rosas, directora para América de Amnesty International.
Más recientemente, Daniel Cerqueira, de DPFL, redactó una refutación detallada de las “sugerencias” de los estados, señalando que el intento demostraba una “falta de conocimientos legales” y una “insolencia histórica e incoherencia diplomática”.
La carta de los estados al sistema interamericano constituye el último ataque contra un órgano de derechos humanos regional prominente. En octubre de 2018, varios miembros apoyaron una declaración conjunta que llamaba a la Comisión Africana de los Derechos Humanos y de los Pueblos a resistir intentos de los estados de debilitar su independencia.