La crisis de la deuda y los impactos sobre los derechos humanos; estudios de caso de Haití, Kenia, Egipto, Jordania, Argentina y Zimbabwe

A nivel mundial, los países se enfrentan a crisis sociales, políticas, económicas y ambientales intensificadas por la pandemia del COVID-19. Para los países de ingresos bajos y medianos, estas crisis se han visto agravadas por la carga de la deuda, lo que limita la capacidad de respuesta de los gobiernos. Este fenómeno ha aumentado la desigualdad y ha puesto en peligro los derechos humanos. La incapacidad de estos países de acceder a las vacunas debido a la protección de la propiedad intelectual por parte de las corporaciones farmacéuticas, la privatización y el nacionalismo de las vacunas ha puesto de manifiesto y agravado los fracasos que han venido evolucionando desde hace tiempo de los modelos y estructuras económicas capitalistas neoliberales. Estas requieren un replanteamiento profundo de las prácticas y condicionalidades de los prestamistas, incluido el FMI y otras IFIs, que con frecuencia han contribuido a estos fracasos.

El FMI ha impuesto consistentemente reformas de política neoliberal y ajustes estructurales en medio de crisis de deuda arraigadas en desigualdades globales y legados coloniales, así como en la captura corporativa de instituciones gubernamentales críticas para la toma de decisiones. Incluso en medio de la pandemia, como lo destacan los casos de Kenia y Argentina, estas reformas estructurales han debilitado los derechos laborales y las protecciones sociales, y han llevado a la privatización y mercantilización de las necesidades básicas, han socavado la soberanía alimentaria, promovido impuestos regresivos e impuesto la austeridad en la mayoría, conduciendo al empobrecimiento, el despojo y las desigualdades crecientes, incluidas las desigualdades de género que enfrentan las mujeres que soportan cargas desproporcionadas de cuidados y están fuertemente representadas en los sectores laborales informales y precarios, junto con muchas comunidades. En marzo del 2021, los miembros de la Red-DESC, a través del Grupo de Trabajo sobre Política Económica, emitieron una declaración pública durante las Reuniones de Primavera del FMI/BM con una serie de demandas, incluida una convocatoria para la reestructuración o cancelación total de las deudas de los países de ingresos medios y bajos. Para demostrar cómo la crisis de la deuda está afectando negativamente la capacidad de los Estados de cumplir con sus obligaciones en garantizar los derechos humanos y socavando el disfrute de los derechos económicos y sociales, los miembros de la Red-DESC han recopilado estudios de caso de varios países que enfrentan impactos sociales, económicos y políticos de las cargas de la deuda soberanas relacionadas con las respuestas del FMI.