Defensa colectiva de la biodiversidad y los derechos sobre la tierra - Resultados de la COP 15

Fecha de Publicación: 
Lunes, 30 Enero 2023

El 19 de diciembre de 2022, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad, celebrada en Montreal, concluyó con la adopción del “Marco Global sobre Biodiversidad Kunming-Montreal” (GBF, por sus siglas en inglés), un acuerdo histórico sobre medidas consideradas fundamentales para hacer frente a la peligrosa pérdida de diversidad biológica y restaurar los ecosistemas naturales.  El Foro Internacional Indígena sobre Biodiversidad (FIIB) elogió el texto por su “firme lenguaje sobre el respeto de los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades locales”. La inclusión de los derechos de los Pueblos Indígenas y las comunidades locales en la Meta 3 sobre la protección de un tercio del territorio oceánico y terrestre del mundo para 2030 (la meta “30x30”) fue especialmente importante dado el grave riesgo de violaciones de los derechos humanos en nombre de la conservación. Estos avances centrados en los derechos fueron posibles en gran parte gracias a la destacada e incansable labor de incidencia desempeñada por los pueblos indígenas y la sociedad civil.

De cara a la COP 15, durante las conversaciones preparatorias entre los Estados, miembros de la Red-DESC enviaron una carta colectiva pidiendo a todas las Partes en el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) que, entre otras cosas, protegieran los derechos humanos fundamentales relativos a la tierra en solidaridad con las demandas del FIIB, y se han incluido recomendaciones textuales clave en el GBF. [Más información sobre nuestra incidencia, consulte aquí]. También estuvimos presentes con una pequeña delegación en las posteriores discusiones entre sesiones que tuvieron lugar en junio en Nairobi, Kenia. Por supuesto, aunque el acuerdo final reconoce los derechos de los Pueblos Indígenas y las comunidades locales, estos derechos deben ser ahora rigurosamente aplicados.

La sociedad civil también ha expresado su preocupación por aspectos clave del Acuerdo. La alianza del CDB, aunque acogió con satisfacción el lenguaje claro sobre derechos, género y participación, especialmente los derechos de los Pueblos Indígenas y las comunidades locales, expresó su preocupación por el hecho de que el GBF no aborda las causas profundas de la pérdida de diversidad biológica y, lo que es peor, incorpora sistemáticamente injusticias, lo que podría socavar el acuerdo. Su declaración final subrayaba: “La causa de la crisis de la biodiversidad es un sistema que antepone los beneficios y el poder de las empresas a las personas y la naturaleza y permite que los intereses empresariales influyan en los resultados. Nuestros gobiernos han cedido lamentablemente sus responsabilidades de regular el sector privado empresarial y financiero, limitándose a ‘animar y permitir’ a las empresas que informen y etiqueten los productos, trasladando la responsabilidad a los consumidores. Esto no cambiará el impacto real sobre la biodiversidad. No hay medidas de rendición de cuentas ni responsabilidad por los daños causados”. Dado el declive sin precedentes de la biodiversidad de nuestro planeta y lo que está en juego, será vital abordar estas cuestiones estructurales.

En cuanto al GBF adoptado en la COP 15, Lakpa Nuri Sherpa, Copresidente del FIIB y Coordinador del Programa de Medio Ambiente de Asia Indigenous People’s Pact (miembro de la Red-DESC), al pronunciar el discurso de clausura del FIIB declaró: “Debemos trabajar con rapidez y eficacia para su aplicación. Desde las profundidades de nuestros territorios, nuestros antepasados y autoridades nos instan a tomar medidas serias para proteger a nuestra Madre Tierra y a toda la vida, junto con nosotros”. Chris Chapman, de Amnistía Internacional, subrayó que “teniendo en cuenta las deficiencias de este marco, vigilar la aplicación del acuerdo y combatir las violaciones de derechos humanos derivadas del establecimiento de áreas protegidas será absolutamente imprescindible”.

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Numerosos miembros de la Red contribuyeron a nuestra labor colectiva para lograr los resultados mencionados, sobre todo a través del Grupo de Trabajo sobre Medio Ambiente y DESC, con especial agradecimiento a:  African Indigenous Foundation for Energy and Sustainable Development, Amnistía Internacional, Asia Indigenous Peoples Pact, Comité Ambiental en Defensa de la Vida, Confederación Campesina del Perú, Consejo de Pueblos Wuxhtaj, FIAN International, Forest Peoples Programme, Indigenous Peoples Rights International, Manushya Foundation, Minority Rights Group International, Movement for the Survival of the Ogoni Peoples, Ogiek Peoples' Development Programme, Pakistan Fisherfolk Forum y Tebtebba.