Organización indígena denuncia represión del Gobierno de Ecuador contra sus miembros

Fecha de Publicación: 
Lunes, 12 Enero 2015

La Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas, CAOI, ha expresado su preocupación por la manera en la que el Gobierno Nacional de Ecuador viene adoptando algunas medidas que atentan contra las organizaciones representativas de los pueblos indígenas y que mantienen una postura firme por la defensa de los derechos de los pueblos, las comunidades, el ambiente y la Madre Tierra.

La CAOI expresa su más enérgico rechazo al pretendido desalojo de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, CONAIE, del local que ocupan por más de 30 años, bajo el pretexto de la necesidad de albergar a un grupo de adolescentes en situación de riesgo. CAOI insta, si la necesidad es real, a que se busquen otros mecanismos para atenderla y no que se afecte a una institución que ha jugado un papel importante en la lucha por la defensa de los derechos y contribuido a la democracia en Ecuador.

Según la CAOI, esta acción, sumadas a otras emprendidas por el régimen ecuatoriano, forma parte de una serie de medidas represivas que busca debilitar a los movimientos sociales, en especial a las organizaciones indígenas que mantienen una voz crítica a las políticas estatales que afectan sus territorios y derechos.

La organización hace un llamado a las organizaciones indígenas y de la sociedad civil ecuatoriana a fin de que se sumen a las acciones de repudio contra un régimen que, mientras para unos se dice progresista, defensor de los derechos de la Naturaleza y protector de los derechos de los pueblos, para con los pueblos indígenas solo tiene actitudes revanchistas y represivas.

Finalmente la CAOI recuerda que, de acuerdo al artículo 5 de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, “Los pueblos indígenas tienen derecho a conservar y reforzar sus propias instituciones políticas, jurídicas, económicas, sociales y culturales, manteniendo a la vez su derecho a participar plenamente, si lo desean, en la vida política, económica, social y cultural del Estado.

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