Proceso de investigación y participación comunitaria
Durante varios meses, el CHRD formó a 30 investigadoras e investigadores comunitarios —10 en cada soum de Murun (provincia de Khentii), Bayandun (Dornod) y Dariganga (Sukhbaatar)— para realizar encuestas, grupos focales y entrevistas. En conjunto, recopilaron testimonios detallados sobre la pérdida de ganado, la destrucción de cultivos, los daños a infraestructuras y la desaparición de fuentes de ingreso provocadas por desastres climáticos como el zud (invierno extremo) de 2024 y las recientes inundaciones repentinas.
Temas abordados
Los desafíos que enfrentan las comunidades pastoriles y agrícolas frente al cambio climático.
El nivel de conocimiento sobre las políticas nacionales de adaptación y mitigación.
Las capacidades locales para evaluar impactos climáticos e incidir en la toma de decisiones gubernamentales.
Principales hallazgos
El zud de 2024 y las inundaciones recientes causaron grandes pérdidas de ganado y destruyeron toneladas de cultivos.
Muchas familias afectadas no sabían dónde ni cómo solicitar apoyo.
Aunque las autoridades locales reportan la existencia de políticas climáticas con participación ciudadana, la mayoría de las comunidades no las conoce ni participa activamente en su implementación.
Metodología participativa
Encuestas: 300 personas participantes (100 por soum), con cuestionarios diseñados por los equipos comunitarios.
Grupos focales: 12 sesiones con personas mayores, pastores hombres, mujeres pastoras y grupos vulnerables.
Entrevistas: 28 informantes clave, entre ellos gobernadores y administradores locales.
Audiencias públicas: Los resultados fueron devueltos a las comunidades, generando sorpresa y reconocimiento por la claridad y solidez de las presentaciones.
Desafíos y aprendizajes
Las condiciones climáticas extremas dificultaron el acceso a familias ubicadas a más de 50 km; la calidad limitada del material audiovisual afectó la documentación, y los requisitos administrativos y financieros representaron un reto para los equipos locales. Sin embargo, el proceso fortaleció las capacidades comunitarias para investigar, comunicar y exigir respuestas.