Celebramos los logros de la campaña por el Protocolo Facultativo al PIDESC

La Reunión Global de Estrategia de la Red-DESC, celebrada el pasado mes de noviembre en Buenos Aires (Argentina), fue el momento oportuno para compartir las lecciones aprendidas y celebrar los logros obtenidos, tras ocho años de acciones, de la Campaña por la Ratificación del Protocolo Facultativo al Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PF-PIDESC), liderada por la Coalición Internacional por el PF-PIDESC y coordinada por la Red-DESC.

Dentro del largo proceso de apoyo a la Coalición de ONG para el PF-PIDESC, la membresía de la Red-DESC oficialmente adoptó la Campaña durante su Asamblea General en Nairobi (Kenia) en 2008 y desde entonces la Red ha coordinado los esfuerzos de la Coalición con el liderazgo de un Comité Conductor[1] integrado por organizaciones de todos los continentes.  La membresía y aliados/as de la Red han trabajado sin pausa para cumplir los objetivos de la Campaña, celebrando la adopción del PF-PIDESC, por la Asamblea General de Naciones Unidas, en el 10 de diciembre de 2008. 

La Campaña fue clave, entre otros objetivos, en desencadenar la entrada en vigor del PF-PIDESC en mayo de 2013 y sumar ratificaciones en todas las regiones del mundo. Asimismo, logró reactivar el Grupo de Amigos del PF-PIDESC [2], compuesto por países que han ratificado el PF-PIDESC (y otros en vías de hacerlo) y se han comprometido a realizar incidencia entre otros estados miembros de las Naciones Unidas, mientras que promovían los DESC en otros espacios de la ONU.

Ahora celebramos la conclusión de la Campaña, ocho años después, con objetivos cumplidos y lecciones aprendidas, y damos paso a nuevas acciones transversales incorporando el acceso a la justicia. Asimismo, los logros alcanzados por la Campaña contribuirán como base para enfrentar nuevos desafíos para la realización de los DESC. 

Como parte del trabajo colectivo, la Red-DESC continuará apoyando las campañas nacionales para la ratificación por medio de varios recursos que han sido desarrollados durante la campaña y buscará potenciar los logros obtenidos mediante las acciones colectivas de varios de sus Grupos de Trabajo para asegurar el acceso a la justicia en la práctica, mientras que seguirá trabajando con el Comité de DESC y el Grupo de Amigos.

El PF-PIDESC ha sido un instrumento disponible desde mayo de 2013. Ahora las personas que sufran violaciones a sus derechos económicos, sociales y/o culturales pueden acceder a la justicia a nivel internacional, si sus Estados lo han ratificado y no han proporcionado un recurso efectivo de acceso a la justicia a nivel nacional.

Un largo camino se ha recorrido a favor de la justiciabilidad de los derechos económicos, sociales y culturales, desde que el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales fuera adoptado 50 años atrás, junto a su hermano, el Pacto de Derechos Civiles y Políticos. En ese momento histórico, una división artificial fue creada entre estos “grupos” de derechos y fueron tratados de manera diferente. Los derechos civiles y políticos gozaron inmediatamente de un mecanismo de exigibilidad, mientras que los derechos económicos, sociales y culturales fueron relegados a un plano secundario. La experiencia vivida por las personas demuestra que, tal y como la Declaración Universal de DDHH lo incorporó, los derechos humanos son inseparables. Esto fue reafirmado por la Conferencia Mundial de Derechos Humanos de Viena en 1993, cuando la noción de interdependencia e indivisibilidad de todos los derechos humanos tomó impulso y se retomó el objetivo de contar con un mecanismo de quejas para los DESC, en pie de igualdad con los derechos civiles y políticos.

Un recurso efectivo ante la violación de los DESC era vital, para reforzar que todos los derechos humanos son inherentes a la dignidad como seres humanos.

La sociedad civil organizada ha sido clave en el empuje del reconocimiento de todos los derechos y así lo fue a la hora de demandar con fuerza las condiciones para establecer un mecanismo de reclamación para los DESC. Entre esos esfuerzos, la Coalición Internacional por el Protocolo Facultativo al PIDESC fue tomando forma. En 2001 se consolida, tras una reunión en Sudáfrica, para articular los esfuerzos existentes y potenciar acciones a nivel internacional, logrando ser un actor clave en el proceso que llevo a la adopción del PF-PIDESC. Una serie de propuestas para contribuir al contenido del nuevo instrumento, incluyendo su aplicabilidad a todos los derechos consagrados en el PIDESC y la incorporación del estándar de razonabilidad, así como la elaboración de las reglas de procedimiento, fueron parte de los aportes impulsados por los miembros de la Coalición, en colaboración con sus aliados.

Tras años de discusiones, debates y aportes, el PF-PIDESC fue adoptado en el 10 de diciembre, 2008 por la Asamblea General de Naciones Unidas, celebrando el 50 aniversario de la Declaración Universal de DDHH. Este fue un momento histórico para los derechos humanos, al establecer por fin y sin lugar a dudas, la valoración de todos los derechos en pie de igualdad y por lo tanto su exigibilidad ante el Estado en tanto sujeto obligado y su justiciabilidad en caso de no cumplimiento. Fue uno de los hitos en el camino trazado a favor del pleno goce de todos los derechos.

Ante la adopción y la apertura a la firma y ratificación del nuevo instrumento, la sociedad civil adoptaba ahora nuevos objetivos. La Coalición se planteó la Campaña por la Ratificación del PF-PIDESC y, con ella, el objetivo clave de asegurar la entrada en vigor por medio de la obtención de diez ratificaciones iniciales y asegurar ratificaciones en todas las regiones y de seguir contribuyendo a la comprensión del nuevo instrumento, como algo vital para todas las personas de cualquier lugar del mundo. 

Asimismo, la entrada en vigor del Protocolo fue otro de los momentos clave del proceso, lo cual generó presión sustancial para avanzar con más ratificaciones. Particularmente, la Coalición tuvo un rol activo central el proceso que llevo a la décima ratificación, la cual activó la entrada en vigor, proceso que permitió aprender lecciones que la Red-DESC está ahora en condiciones de aplicar en nuestro trabajo integral de derechos humanos.

La colaboración con el Grupo de Amigos del PF-PIDESC fue otro de los objetivos propuestos, el cual fue logrado por la Coalición para el PF-PIDESC. Esto implicaba contribución hacia a la activa promoción del nuevo instrumento entre sus pares, Estados Miembros de la ONU, así como alentando y apoyando acciones a favor del tratado y mayor entendimiento de la dimensión del PF-PIDESC. Hoy el Grupo de Amigos ha expandido su trabajo, pasando a denominarse Grupo de Amigos de los DESC. Este Grupo de países promueve posturas, resoluciones y acciones a favor de los DESC en el seno de Naciones Unidas y, por ende, con resultados también en el plano nacional, donde los derechos se ponen a prueba todos los días.

El Comité DESC emite sus recomendaciones ante el primer caso bajo el PF-PIDESC en septiembre de 2015. En esta ocasión, el Grupo de Trabajo de Litigio Estratégico de la Red-DESC realiza una intervención como tercero, ayudando a asegurar, en IDG v España, una decisión positiva para las personas involucradas cuyo derecho a la vivienda había sido violado. El caso también reforzó el espacio para las intervenciones de terceros. 

Finalmente, al revisar el trabajo realizado y el camino recorrido, especialmente de destacar y agradecer, es el liderazgo proporcionado por el Comité Conductor de la Campaña para cumplir los objetivos establecidos. Las personas y organizaciones que han cumplido este rol a lo largo del proceso continúan como referentes en la lucha para asegurar acceso a la justicia para los DESC y serán clave ante nuevos esfuerzos colectivos, que incorporarán el apoyo continuo para la ratificación del Protocolo al PIDESC y el acceso a la justicia más ampliamente en las acciones futuras. 

Como ha sido reafirmado por los miembros de la Red-DESC, debemos responder colectivamente a las condiciones globales donde millones de personas son oprimidas por intereses corporativos e ideológicos que operan en un sistema donde la desigualdad se agudiza, la represión se utiliza para acallar las voces disonantes y donde la destrucción de los medios de vida y recursos naturales parece continuar sin límites. El trabajo a favor del acceso a la justicia, incluyendo el PF-PIDESC seguirá siendo importante. 

Mientras nos preparamos para responder a las condiciones que afectan el goce de sus derechos a millones de personas, la experiencia y los espacios ganados son un testamento a la fuerza del trabajo colectivo y merecen ser celebrados