Summary
Durante la construcción de un oleoducto en Myanmar por parte de Unocal, empresa estadounidense productora de petróleo y gas, ésta contrató al ejército de dicho país para que lleve a cabo tareas de seguridad en la obra. Los pobladores locales de la zona en la que se estaba construyendo el oleoducto denunciaron que el ejército los sometió a desalojos forzosos, los obligó a trabajar en el proyecto, y cometió violaciones, asesinatos y torturas. Posteriormente, los afectados presentaron dos causas en el Tribunal de Distrito de California, cuyas sentencias favorecieron a Unocal por medio de un juicio sumario.[1] Los peticionantes apelaron la sentencia y en 2002 el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de EEUU revirtió la decisión del Tribunal de Distrito rechazando las órdenes del juicio sumario, y decidió que la demanda contra Unocal debía ser sometida a juicio. Al emitir su decisión, el Tribunal de Apelaciones sostuvo que para que haya responsabilidad bajo la ATCA no se requiere que la violación de los derechos se haya producido por medio de la acción del Estado (por parte del Estado o como extensión de su autoridad), si la violación fue cometida al fomentar delitos que, de por sí, no requieren de la acción del Estado para configurar responsabilidad, como los crímenes de guerra, el genocidio y la esclavitud. El Tribunal determinó que el trabajo forzoso es una forma moderna de esclavitud, por lo que es posible establecer la responsabilidad de las personas, incluyendo corporaciones como Unocal, conforme a la ATCA. En consecuencia, el tribunal determinó que Unocal podía ser responsable bajo la ATCA por asistir e incitar (o proveer asistencia voluntaria) al ejército de Myanmar a establecer un sistema de trabajos forzosos, asesinatos y violaciones, dado que se podía demostrar razonablemente que Unocal sabía que el ejército estaba cometiendo las violaciones y proveía su asistencia. Las pruebas disponibles no demostraban la misma responsabilidad respecto de los actos de tortura. Sobre la base de estas conclusiones, el Tribunal decidió que había suficientes pruebas para avanzar a la etapa de juicio.
[1] En los juicios sumarios, el juzgado decide sobre la base de los méritos de todo el caso o temas jurídicos específicos sin que tenga lugar un juicio completo.