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Jueves, Octubre 10, 2024
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Durante el Encuentro de Movimientos y Organizaciones Sociales celebrado en Nueva York el mes pasado, activistas y defensores de los derechos humanos expresaron su creciente preocupación por la captura corporativa de la gobernanza mundial. El evento fue organizado por movimientos sociales en forma paralela a la Cumbre del Futuro de la ONU del 21 al 23 de septiembre. A lo largo de los cuatro días que duró el encuentro resonó una pregunta fundamental: ¿las personas o los beneficios?

El objetivo del evento fue presentar soluciones transformadoras para los grandes problemas mundiales y cuestionar el enfoque “ONU 2.0” del Secretario General de Naciones Unidas, que asigna un mayor rol a las empresas transnacionales, el multisectorialismo y la “gobernanza en red”.

“Conferimos una especie de ‘halo’ a las empresas transnacionales, en particular a las empresas digitales, para que aborden nuestros retos fundacionales, en áreas centrales como la universalización de la educación, sin importar lo que ello signifique para la inclusión o la desigualdad”, afirmó Anita Gurumurthy, miembra fundadora y directora ejecutiva de IT for Change. “Al ceder las infraestructuras sociales a estas entidades, estamos cediendo el control que tenemos como personas sobre el dominio público. No se trata de capacidad, sino de responsabilidad, y de lo que más valoramos. ¿Las personas o los beneficios?”

Las organizaciones miembro Habitat International Coalition (HIC)People’s Health Movement (PHM)FIAN InternationalCorporate Accountability, entre otras parte del Grupo de Trabajo de los Pueblos sobre Multistakeholderism (multisectorialismo) y el Grupo de Trabajo sobre Rendición de Cuentas Corporativa, participaron en las actividades preparatorias para la Cumbre del Futuro. Respondieron a pedidos de aportes para el Pacto para el Futuro, un documento negociado intergubernamentalmente y orientado hacia la acción con “potencial para promover un sistema multilateral que refleje las realidades de hoy y aporte soluciones para todos en todas partes”, según la ONU. Los miembros también participaron en consultas y en la Conferencia de la Sociedad Civil, que tuvo lugar en mayo de 2024 en Nairobi, cuyo objetivo fue movilizar aportes de actores no estatales para el Pacto.

Al ceder las infraestructuras sociales a estas entidades, estamos cediendo el control que tenemos como personas sobre el dominio público. No se trata de capacidad, sino de responsabilidad, y de lo que más valoramos. ¿Las personas o los beneficios?
— Anita Gurumurthy, miembra fundadora y directora ejecutiva (IT for Change)

Grace Chikumo-Mtonga, presidenta de HIC, asistió a las Jornadas de Acción de la Cumbre del Futuro en las Naciones Unidas, del 21 al 22 de septiembre. Reflexionando sobre las sesiones en las que participó, Chikumo-Mtonga subrayó la importancia de la inclusividad, de reunir a las autoridades locales y a la población, y de tratar de localizar las cuestiones de desarrollo que respondan a las necesidades de la gente. También expresó su opinión general sobre la Cumbre.

“Aunque la Cumbre reunió a diferentes actores de los sectores del desarrollo económico y social, lo que quedó patente es que no proporcionó una hoja de ruta clara sobre cómo debe abordar el mundo los retos globales”, afirmó Chikumo-Mtonga. “No hubo claridad a la hora de abordar cuestiones como el cambio climático, el alto al fuego en las guerras en curso en el mundo y el compromiso de los líderes mundiales con la paz y la seguridad. Resumiendo, la Cumbre no respondió a las expectativas de muchos participantes, especialmente los procedentes de movimientos de la sociedad civil”.

La gobernanza multilateral o multisectorial, con las empresas y sus asociaciones híbridas en el centro, no es la solución a las actuales crisis mundiales, ni para la “modernización” y reforma de la ONU. Por el contrario, es un signo extremadamente preocupante de la creciente captura corporativa del sistema multilateral de la ONU, y de la subversión de la base misma del multilateralismo arraigado en la toma de decisiones entre Estados. La proliferación de mecanismos multipartitos en la gobernanza mundial no la ha hecho ni más inclusiva ni más eficaz; todo lo contrario, ha incluido principalmente a las empresas y solo ha sido eficaz para hacer realidad sus intereses.

La monopolización empresarial de las decisiones que afectan a los medios de vida cotidianos debe enfrentarse mediante la rendición de cuentas y la justicia. Como prioridad, los miembros de la Red-DESC han reiterado la urgente necesidad de regular a los actores corporativos a nivel nacional, regional e internacional, a fin de poner fin a la captura corporativa.

Nota a los editores: