Este informe de incidencia se basa en el intercambio mutuo entre miembros de la Red-DESC, facilitado especialmente a través del Grupo de Trabajo sobre Medio Ambiente y DESC. Basándose en años de análisis centrado en las realidades de las injusticias climáticas y en la intrincada relación entre las pérdidas y los daños y los derechos humanos, hacemos hincapié en la importancia de hacer valer la rendición de cuentas y la justicia. En medio de las tres crisis planetarias del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, es evidente que las medidas significativas relacionadas con el clima, o su ausencia, tienen un impacto considerable sobre los derechos humanos y el bienestar de las comunidades.
Trazar el camino hacia la COP28 y más allá
Como respuesta a la pregunta «¿qué esperamos de la COP28 y más allá? Los miembros de la Red-DESC destacaron los puntos clave que determinan el trabajo de incidencia concentrado en evitar, minimizar y enfrentar las pérdidas y los daños. Surgieron las siguientes prioridades:
- Promoción de enfoques y soluciones lideradas por las comunidades: la participación directa y efectiva de los movimientos y organizaciones de base es imprescindible para dar forma y promover soluciones y enfoques significativos liderados por las comunidades afectadas de forma desproporcionada por las pérdidas y los daños.
- Fondo de pérdidas y daños fundado en los derechos humanos: los países desarrollados deben poner fin a las violaciones de los derechos humanos en los proyectos de mitigación y adaptación, garantizando la continuación de las contribuciones justas a todos los países en desarrollo en la escala de financiación necesaria basada en el principio de Responsabilidades Comunes pero Diferenciadas y Capacidades Respectivas (CBDR-RC).
- Sector privado fuera del fondo de pérdidas y daños: el sector privado, incluyendo el Banco Mundial y otras Instituciones Financieras Internacionales (IFI) deben ser excluidas del fondo de pérdidas y daños para hacer realidad un flujo financiero que no genere deuda.
- Freno a la deuda ilegítima y la quiebra de los países del Sur Global: abordar la responsabilidad histórica y hacer realidad la justicia fiscal, tributaria y de la deuda requiere que los países desarrollados cancelen las deudas ilegítimas e insostenibles, dando prioridad a las obligaciones de derechos humanos y a la protección de los ecosistemas en las políticas de préstamos y salvaguardias.
- Protección a los defensores de los derechos humanos, de la tierra y ambientales: dado el empeoramiento de las crisis mundiales y la urgencia de abordar las pérdidas y los daños, es vital que los países tomen todas las medidas necesarias para proteger a los defensores del medio ambiente, la tierra y los derechos humanos.
- Rechazo de la mercantilización de la naturaleza: para prevenir y enfrentar las pérdidas y los daños, los países deben poner fin a la continua mercantilización de las tierras, los océanos y los recursos naturales.
- Instrumentos legalmente vinculantes sobre las empresas y los derechos humanos: la urgencia de las crisis climáticas requiere instrumentos jurídicamente vinculantes para que los contaminadores y las empresas rindan cuentas de su impacto medioambiental y del respeto a los derechos humanos.
- Remedios y reparación basados en la rendición de cuentas y la justicia: los remedios y las reparaciones deben incluir la participación significativa y efectiva de las comunidades afectadas en todo el diseño y la aplicación de las medidas, incluido el restablecimiento de su identidad y dignidad sobre la base de la responsabilidad y la justicia históricas.
- Suministro de información culturalmente apropiada y accesible para las comunidades de primera línea: los países deben reforzar la transparencia y la rendición de cuentas, proporcionando información sobre cuestiones relacionadas con el clima que sea culturalmente apropiada y accesible para las comunidades de primera línea afectadas de forma directa y desproporcionada por la crisis climática.